4. EL ALACALUFE (kawésqar)
Adalberto Salas

4.1. El bilingüismo alacalufe-castellano

4.2. Denominación y división dialectal

4.3. La investigación lingüística del alacalufe

4.4. La fonología

4.5. El vocabulario alacalufe. Perspectiva etnográfica

4.6. La morfosintaxis

4.7. La investigación lingüística del alacalufe.Estado actual

4.1. EL BILINGÜISMO ALACALUFE-CASTELLANO

Dentro del contexto actual de desintegración de su cultura tradicional, los últimos alacalufes conservan su lengua vernácula, la que utilizan en todas las actividades internas de su grupo. En sus contactos con miembros de los otros dos segmentos poblacionales de Puerto Edén, funcionarios y colonos -o incluso en la sola presencia de éstos -utilizan invariablemente el castellano (Clainis 1985: 28; Aguilera 1978: 22). Esto significa que los alacalufes deben someterse a hablar castellano, o sea, darse el trabajo de ser bilingües. Los funcionarios y los colonos chilotes son monolingües de castellano. Simplemente, ellos dan por sentado, como cosa obvia, fuera de toda discusión o cuestionamiento, que son los alacalufes los que deben acomodarse a sus interlocutores hispanohablantes en la situación comunicativa. Queda muy bien reflejado un hecho fundamental: la identidad alacalufe, con todos sus atributos -entre ellos su lengua -es visualizada por los miembros de los otros grupos como un agregado insignificante, cuando no definitivamente indeseable. Los chilenos no tienen ninguna necesidad de aprender la lengua de los alacalufes. En cambio éstos no pueden sustraerse a la necesidad de hablar castellano. Ellos dependen de los hispanos, no a la inversa. De hecho, las interacciones entre alacalufes e hispanos están siempre referidas a la cultura nacional amplia o a la subcultura chilota y motivadas por la necesidad alacalufe de incorporarse a éstas, aunque sea superficial y momentáneamente, por ejemplo para vender botecitos a los pasajeros de un barco de línea, engancharse como tripulante de un barco pesquero o pedir una donación de ropa o víveres a una institución de beneficencia.

Los alacalufes adultos hablan un castellano mínimo (Clainis 1985: 28), mayormente modelado sobre el castellano chilote, y apenas suficiente para interacciones pragmáticas elementales con los hispanohablantes, tales como comprar, vender, trocar y recibir instrucciones simples. La competencia de los niños alacalufes es algo mejor, principalmente por acción de la escuela, pero como contrapartida, se aprecia algún deterioro en su dominio de la lengua vernácula (Aguilera 1978: 23). Por otra parte, el desaparecimiento o la disminución de los contextos sociales tradicionales, por ejemplo, de las grandes partidas colectivas de caza, tiene que haber tenido algún efecto destructivo o desintegrador sobre la lengua vernácula de los adultos mismos. Si la situación se agudiza, podría eventualmente desembocar en la extinción de la lengua vernácula.

4.2. DENOMINACIÓN Y DIVISIÓN DIALECTAL

Los alacalufes de Puerto Edén se llaman a sí mismos kawésqar literalmente «ser humano, persona, gente». La denominación alacalufe, generalizada en Chile, les es completamente desconocida.33 Dividen terminológicamente a la población no autóctona en yemmá (kawésqar) «(gente) blanca»y kstapón «chilote»o su variante despectiva kstaporáy (Aguilera 1978: 20). La palabra general para «extranjero» es palsĉéwe No se aprecia la existencia de un nombre específico para su lengua, la que es referida simplemente como afséksta «habla, hablar».

Aguilera (1978: 41-42 y 1982: 21) sigue la división clásica de Martín Gusinde, la que distingue tres grupos alacalufes, según su área de dispersión:

1)meridional, entre la península de Brecknock pon el sur y el cabo laman por el norte;

2)central, «…islas y canales que se extienden comenzando pon la boca meridional del canal Smith hasta su salida septentrional incluyendo el amplio territorio oriental de Ultima Esperanza»;

3)septentrional, desde la «boca meridional que conduce al canal Sarmiento, finalizando en la margen sur del golfo de Penas».

La mayor parte de los alacalufes de Puerto Edén pertenece al grupo septentrional, aunque al menos uno, Celia Navanino (Nº 26 en el censo de Clainis 1985: 33), es tawóksers, literalmente «gente del sur», correspondiente al grupo central de Gusinde (V. Aguilera 1978: 31). Aparentemente, las diferencias entre la lengua de los kawésqar y los tawóksers, se manifiestan más bien en el léxico.

4.3. LA INVESTIGACIÓN LINGUISTICA DEL ALACALUFE

Aguilera (1978: 32-46) presenta un panorama completo de la historia de la investigación lingüística sobre el alacalufe, desde 1688 -1689 hasta 1977, o sea, desde el vocabulario de 225 palabras y algunas frases, recogido en Puerto Galland, pon el navegante francés buhan de la Guilbaudiéne,35 a lo largo de diez meses entre 1688 y 1689, hasta el artículo «Lingüística fueguina»de Chnistos Clainis, de 1977. Con posterioridad a 1978 han aparecido los siguientes estudios:

1) Aguilera y Brito (1980-1981) presentan un relato mítico, en un formato muy elaborado, que incluye: a) dos versiones producidas pon el narrador, una en castellano y otra en alacalufe (en transcripción fonética amplia); b) una traducción en la que se consignan los equivalentes castellanos de cada una de las palabras y componentes de palabras del texto alacalufe; c) una traducción literal al castellano, en la que se conserva el orden del texto original alacalufe; d) una traducción libre al castellano; y e) un análisis sintáctico y estilístico del relato;

2) Aguilera (1982) presenta una breve descripción del fonetismo alacalufe y del vocabulario correspondiente a préstamos culturales recientes;

3) Aguilera (1982 y 1983) trae una descripción completa de la fonología de la palabra en alacalufe;

4) Clainis (1985) entrega una descripción completa de la lengua, en la que reúne y amplía información dispersa en 15 artículos suyos publicados entre 1972 y 1985 (para los detalles bibliográficos de estos artículos V. 1985: 513-514); la parte propiamente descriptiva del libro, (1985: 357-502) está dedicada a la fonología, la morfología y la sintaxis;36 entre el material complementario aparece un vocabulario alacalufe-español (1985: 317-355), los apuntes lingüísticos inéditos de José Emperaire (1985: 223-316), la transcripción de 17 textos en alacalufe (1985: 69-222), las páginas introductorias al vocabulario recolectado en el siglo XVII pon buhan de la Guilbaudiére, y una breve introducción etnográfica complementada con un censo de la población alacalufe de Puerto Edén al año 1971 (1985:13-39).

4.4. LA FONOLOGÍA

El alacalufe hablado en Puerto Edén tiene seis vocales: i, e, æ, a, o, u. De ellas, i, e, o y u tienen aproximadamente la misma pronunciación que tienen en castellano. La vocal representada pon ae se pronuncia como la a en el inglés cat, «gato». La a en alacalufe se pronuncia normalmente como en castellano, pero cuando está en contacto con la consonante q su sonido se parece más bien al del francés páte, «pasta», al inglés card, «tarjeta».
Hay 16 consonantes: p, t, k, q, p’, t’, k’, ĉ ,ĉ‘, f, s, h, m, n, 1, r; y dos semiconsonantes: y, w.
La pronunciación de las consonantes es la siguiente:

p como la p en castellano paño; a veces se pronuncia ligeramente aspirada como en inglés papen, «papel»;
t como la t en castellano taza; peno pronunciada con el ápice lingual apoyado en los alvéolos superiores;
k como la c en castellano casa, cosa, cuna. Se trata de una consonante velan, o sea, durante su producción el postdorso lingual obstruye momentáneamente la cavidad oral en la zona del velo del paladar. En castellano de Chile, la qu en palabras como quizás, queso, y la k, en palabras como kilo, kerosene, es postpalatal, o sea, la obstrucción tiene lugar en la zona posterior del área palatal. La k alacalufe es siempre velar, cualquiera que sea la vocal que la sigue;
f como en castellano faro, feo, filo, foso, fusil.
s como en castellano saco, seco, silla, sopa, suyo; peno en posición final de sílaba se pronuncia a veces como la sh en inglés cash (al contado).
Ĉ como en castellano chapa;
m como en castellano masa;
n como en castellano nariz;
l como en castellano lado;
r como en castellano caro; en posición intenvocálica se puede pronuncian además como la nr en castellano carro.
Las consonantes q, p’, t’,ĉ’, k’, h no tienen correspondiente en la fonética castellana:
q se pronuncia como la c en castellano casa, cosa, cuna, pero con el postdorso lingual obstruyendo la cavidad oral en la zona uvular. Debe distinguirse cuidadosamente de la velar k. lambién puede pronunciarse “aspirada”, esto es, seguida de un soplido producido en la laringe. Una tercera posibilidad es pronunciarla como una j castellana (como en ja-nro, jota, julio), pero articulada en la zona uvular.
Las consonantes p’, t’, k’y Ĉ’ son «glotalizadas» o «leyectivas». En lo que respecta a la cavidad oral, la articulación es igual a la de p, t, k, y ĉ respectivamente. La diferencia está en que simultáneamente se retiene la respiración en la garganta; al mismo tiempo que se articula la consonante se libera bruscamente el aire retenido, el que egresa con un chasquido glotal.
h es aspirada como la h en inglés house, «casa»o en alemán Haus, «casa». Ocasionalmente se pronuncia como la j castellana (en palabras como jarro, julio).
Las semiconsonantes y y w se pronuncian respectivamente como las vocales i, u de palabras castellanas como piano, puente, aire, causa, o sea, en una sola emisión de voz con la vocal contigua, formando una sola sílaba con ésta.

Además de las consonantes propiamente tales, existe un golpe glotal (?) de estatus dudoso. Un golpe glotal se produce reteniendo momentáneamente el aire en la laringe y liberándolo bruscamente.
El acento alacalufe es libre y puede desplazarse a lo largo de las tres últimas sílabas de una palabra, sin producir alteración en la percepción de la palabra: en cualquier distribución acentual (esdrújula, grave, aguda), la palabra mantiene su significado.
En alacalufe son muy característicos los grupos consonánticos: hasta tres consonantes agrupadas pueden aparecer en posición inicial o final de palabra, en tanto que en posición intermedia pueden aparecer grupos de hasta cuatro consonantes.38 En general, las consonantes aisladas o agrupadas se pronuncian con bastante tensión articulatoria, en tanto que las vocales son más bien relajadas y difusas.
Las siguientes palabras ilustran el fonetismo alacalufe:

1.

agua
boca
brazo
ĉafaláy
afkstáy
arktésqar
4.cabeza
cara
ceniza
cielo
taskár
taskál
aymakás
árka
8.corazón
día
diente
espalda
ĉenáks
aswál
serékte
taqáyte/taqáytqal
12.estrella
fuego
guata/vientre
hombre
ĉ’elasáwe
afĉár
ówskstay
aksánas
16.hueso
humo
lengua
luna
qar
ayékyu
qaláktaes
akéwek-sélas
20.lluvia
mano
montaña
mujer
áperk
terwá
wésqar
asátap
24.nariz
niebla,neblina
noche
ojos
nóws
k’eplás/áyqen
ak’yáwe
tás
28.orejas
pecho
pelo
pene
k´yáwe
kyepqárpe
tasĉar-éyok
hayéso
32.perro
pie
piojo
pierna
kyóro
qát
qamálay
qát
36.sangre
senos
sol
uña
kstánkse
ĉeqyáw
arkák-sélas/aswél-sélas
ksteyésqar
40.vulvak’yót

4.5. EL VOCABULARIO ALACALUFE. PERSPECTIVA ETNOGRAFICA

El vocabulario alacalufe es muy sensible a las condiciones del ambiente patagónico. Por ejemplo, dispone de palabras específicas que establecen distinciones en la flora y fauna -especialmente marina- que en castellano no se hacen o se hacen de un modo superficial por medio de perífrasis. Por ejemplo, para el mamífero marino que en castellano se llama lobo marino, con una perífrasis que indica que no se trata de una denominación básica, hay en alacalufe cuatro palabras:

lobo marino común
lobo marino fino
lobo marino macho lobo toruno
ĉekéya
arkáse
yekentáwan
ĉeĉenákar

Del mismo modo, hay palabras específicas para los distintos tipos de patos marinos que en castellano se distinguen perifrástica-mente -sólo cuando es necesario-, por medio de adjetivos aplicados al sustantivo pato:

pato anteojillo
pato barrero
pato lile
pato quetro
pato volador
qarqáyes
wasána/qaltálk
ayyárak
qánwes
yéryen

Esto evidencia una manera diferente de ven el mundo: en castellano se trata de diferentes clases de patos, en alacalufe son aves marinas completamente diferentes entre si.
La cultura tradicional de canoeros nómadas cazadores y recolectores marinos se refleja en un matizado vocabulario vinculado a la embarcación tradicional (káyef). Por ejemplo:

a) maniobras, tales como ahálay «achicar la embarcación», asákyar «arriar la vela», yekólay «empujan la embarcación», o kersákta «izar la vela».

b) implementos y partes, tales como ahásqe «achicador»con su arqár «asa»y su kyótqal «base»; ĉepkenáhar «anda»; ĉ‘afasktéhar «brasero de barro para llevar fuego en la canoa»; tafáqay o kĉewéskar «remo corto antiguo»; o ĉersákta «vela de embarcación»;

c)desplazamientos pon vía marítima, tales como ĉelkokénar «encontrar navegando»; ĉelhóhoy «llegar navegando»; aqakénak «salir al encuentro navegando»; o ĉelkwáyeks zarpar

La riqueza del vocabulario alacalufe también se aprecia cuando se encuentra vinculado a las actividades de caza y recolección marinas, por ejemplo: kwátal «anzuelo», yewayóhar «arpón para cazar lobos»; t’ánt’ar «arpón de varios dientes»; ama «arpón doble para pescar ĉ‘áwes «fisga»; e ekwák «garrote, para matar lobos»; senékste «honda para cazar pájaros»; diversos tipos de lazos, como féyĉek «lazo de cuero de lobo», táy «lazo de yoqui», tánqe «lazo para cazar patos quetno», arkás «lazo múltiple»; kĉ‘awéskar «lienza de pesca ; feytĉétqal «red para cazar lobos».

4.6. LA MORFOSINTAXIS

En general, los sustantivos y adjetivos alacalufes no presentan variaciones formales de género y número, pero en los sustantivos que implican la noción de persona, puede especificarse el femenino por medio del sufijo -sé-las. Por ejemplo:

ayhyól hijo (en general, hombre o mujer)
ayhyól-sélas hija (mujer)

La hembra de algunos animales puede especificarse por medio de la yuxtaposición de la palabra wálak «hembra». Por ejemplo:

k’eyéto gato (en general, macho o hembra)
k’eyéto-wálak gata (hembra)

El minificador -yeké y el femenino -sélas pueden combinarse entre sí, como en:

yemmá
persona blanca (no alacalufe/no chilota)
yemmá-sélas-yeké
persona blanca -femenino-minificador niña blanca

Hay un sufijo -s de valor posesivo-partitivo (genitivizador o partivizador). tiene significado posesivo en:

kyóro-s tasqár
perro-genitivo cabeza
la cabeza del perno

El significado de partitivo (parte de un todo, explícito en el enunciado o implícito en la cultura), puede apreciarse en el siguiente ejemplo de Aguilera y Brito (1980-1981: 309):

yála kawesqár arksá-s wa
antiguo persona joven-partitivo
Antiguamente un joven cuando
Kyus ĉaĉár askét’ laálte kuteké
su padre nutnia y
su padre nutrias ykayésqa léyes ksepĉes-asos…
pájaro buscar irse- pretérito
pájaro buscar pájaros se había ido a cazar…

El posesivo-partitivo -s, sufijado a arksá «joven» indica «…la pertenencia del protagonista a un grupo o un clan, en el cual él integra el subgrupo de los más jóvenes»(Aguilera y Brito
1980-1981: 316).
A partir de raíces verbales pueden formarse sustantivos por medio de sufijos:

-ap «agente», por ejemplo, de leyes «ver, cuidar»se forma leyés-ap «cuidador, guardián»;
-har «instrumento», por ejemplo, de yemó «bogar»se forma yemóhar «remo».

El alacalufe forma sustantivos compuestos con mucha facilidad; los compuestos son de dos miembros, como en:

káwés + éyok = káweséyok
piel pelo vello corporal

o de tres miembros, como en:

tas + kstáy + ĉafaláyhar = taskstayĉafalayhar
ojo canal botella anteojos
(Nótese que el último componente, cafaláyhar «botella», contiene a su vez dos elementos: ĉafaláy «agua»y -har «sufijo instrumental».)

La facilidad con que el alacalufe forma palabras nuevas por medio del recurso de la derivación o la composición puede explicar la relativa falta de préstamos del castellano en su vocabulario: frente a un objeto inexistente en la cultura tradicional, el alacalufe prefiere formar un término nuevo desde su interioridad a acomodar la palabra castellana a su fonetismo. Por ejemplo:

kyuyés + har
relámpago + sufijo instrumental = ampolleta

Sin embargo, el recurso del préstamo no está ausente del todo, como puede apreciarse en:

asúiska (del castellano azúcar)
azúcar
kyapitán (del castellano capitán)
capitán, patrón de lanchaa veces el préstamo castellano alterna con la voz tradicional:
apala- wayena (del castellano ballena)
ballena
En los pronombres personales propiamente tales hay formas para 1ªy 2ª persona, sin contraste por número, pero finamente matizados desde el punto de vista de la vinculación entre persona y acción. Así, para la 1ª persona existen una forma «simple»o «trascendente», ce (o ces), que no marca el tipo de vinculación entre persona y acción, y dos formas «compuestas»(coco): 1) forma simple ce-es-ce (apocopada: ces), que tiene valor atributivo, como en: asúiska (del castellano azúcar)
azúcar
kyapitán (del castellano capitán)
capitán, patrón de lanchaa veces el préstamo castellano alterna con la voz tradicional:
apala- wayena (del castellano ballena)
ballena
ĉe-es-ĉé af-kyáwelna
yo estoy sano
ĉes yenák asár
yo soy maloo valor de agente, como en:
ĉes kskená kekyáyeks-pas
yo huí corriendoo valor de experimentador, como en:
ĉes talks kehéna-yenák
yo cigarrillos quiero 2)forma compuesta ¿óco (apocopada: ¿o) de valor autoactivante, como en: ĉóĉo káyef yéksor
yo mismo bote veo Dos formas han sido registradas para la 2ª persona: una simple o trascendente, caw, y una exhortativa, ĉaws o ĉaes, como en: ĉaws yémo kehená-ka
tú (invitado) remar deseas
¿quieres remar?
asá-qey
comer él
él comió

Para la 3ª persona se usa el demostrativo tow «ése»o se sufija al verbo la forma -qey, como en:
ĉóĉo káyef yéksor
yo mismo bote veo aparentemente, la presencia del sufijo verbal
-qey de 3ª persona es opcional: no aparece si el sujeto está mencionado en el enunciado. Así en:
..kyus ĉaĉár askét’ laálte kuteké
su papá nutnia y kayésqa leyes ksepĉés-asos…
pájaro buscan irse-pretérito (Aguilera y Brito 1980-1981: 309) la marca de 3ª persona, qey, no aparece en la forma verbal porque el sujeto ya está expresado en el enunciado (kyus cazar «su papá»).
No se han registrado sufijos verbales para la 1ªo 2ª persona. Al parecen, basta la aparición en el enunciado del pronombre personal correspondiente donde no se aprecian marcas de persona en la forma verbal (táwon-yenák): ĉaws káyef arláy táwon-yenák
tú bote grande tener-presente
tú tienes un bote grande El enunciado está atribuido al oyente, 2ª persona singular, por medio del pronombre personal respectivo (ĉaws, «tú»).
Si bien el verbo alacalufe se ve relativamente insensible a la variación por persona, parece estar bien diferenciado desde el punto de vista del tiempo (ubicación en un punto de la línea temporal) y del aspecto (duración en el tiempo). Para Aguilera (1978: 56-57), las distinciones temporales se expresan de dos maneras: 1) por medio de una partícula, -asós, «pretérito», que aparece como nexo conjuntivo en las oraciones compuestas, por ejemplo: kwosá kawésqar kwos laálte
después persona después nutria
…después de que el jovenqar-ker-asós
matar durativo- pretérito
estuvo matando la nutnia… 2) por medio de sufijos opcionales que establecen las siguientes distinciones temporales: – presente -yenák
– pretérito puntual -pas
– pretérito reciente -áfqat
– pretérito remoto -hóraras
– futuro -sékwe Se ha registrado un sufijo opcional, -ker, que expresa aspecto durativo, o sea, presenta la acción o el evento como prolongándose en el tiempo, por ejemplo en: ĉo laáltes yeksór-pas
yo nutria ver pretérito reciente
recién vi una nutnia
la duración del «ver»no está expresada, pero más bien se entiende como acción concluida.En cambio en:
ĉo laáltes yéksor-kér-pas
yo nutria ver-durativo-pretérito-reciente
recién estuve viendo una nutria
la acción del «ver»está presentada en su duración temporal: vi (concluido o perfectivo) vs. estuve viendo (durativo o imperfectivo). Aguilera y Brito (1980-1981: 305 y 313) presentan otros dos sufijos verbales vinculados al
modo, o sea, al grado de consistencia y realidad atribuidos a la acción o al evento del verbo: -ay «imperativo», como en:
seĉéwor-aĉá?-ay
traen-referencial-imperativo
¡trae eso!y -aekstá, «hipotético», como en:
?eyekwákyan-sekwé-aekstá-ket
matan con garrote-futuro-hipotéticoreforzativo
matarás (al coipo) con el garrote Este único ejemplo sugiere más que un sentido hipotético, un valor de evento o acción condicionada al cumplimiento de una hipótesis: «dado que el coipo entre, lo matarás a garrotazos»o «si el coipo entra, lo matarás a garrotazos». También está descrito en Aguilera (1978:56) un prefijo verbal, ĉeĉáw-, de sentido «reflejo»o «reflexivo», como puede apreciarse en: ĉeĉáw-séyes-yenák
reflejo peinar presente
peinarse (uno mismo) En el texto presentado por Aguilera y Brito 1980-1981 se puede constatar la aparición, en el discurso alacalufe, de una serie de partículas, algunas pertenecientes al ámbito del verbo («partículas verbales») y otras pertenecientes más bien al ámbito de la oración completa («partículas irrestningidas»), cuya función es-aparentemente- la de vincular al hablante con su enunciado. Por ejemplo, la partícula irrestningida -Sa tiene como función subrayar la información focal del enunciado, y la partícula verbal hoyok, llamada «narrativa», tiene como función indicar que el contenido del enunciado procede de relato tradicional, y no de la experiencia directa y personal del emisor.

4.7. LA INVESTIGACIÓN LINGUÍSTICA DEL ALACALUFE. ESTADO ACTUAL

La lengua alacalufe ha sido estudiada, desde la década del ‘70, por dos lingüistas profesionales:

Oscar Aguilera y Christos Clainis. Trabajando separadamente, ambos investigadores han venido entregando a la comunidad científica sus observaciones en artículos publicados en revistas especializadas nacionales y extranjeras. En1985 Christos Clainis publicó una descripción completa de la lengua (Clainis 1985: 357-502).

Las publicaciones de Aguilera y de Clains son altamente especializadas, en el sentido de que están dirigidas a un público lector preparado en lingüística descriptiva. Hasta el momento no se ha escrito en Chile una obra de divulgación, que ponga al alcance del público no especializado el conocimiento que los profesionales han acumulado en dos décadas de investigación de la lengua alacalufe.

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